La gestión y planificación del arbolado urbano, fundamentada en criterios técnico/científicos y mediante una estrategia integral, genera impactos positivos desde el punto de vista medioambiental, económico, social y de salud pública.
Los principales trabajos que integran la planificación del arbolado urbano:
Un inventario técnico de arbolado urbano debe recoger sistemáticamente información estandarizada que comprenda varios bloques:
Planes de poda ajustados al Estándar Europeo de Poda del Consejo Europeo de Arboricultura y al servicio de cada municipio y organismo. Los planes de poda se establecen en el calendario según el tipo de poda necesaria para cada ejemplar, según sus características y según las condiciones para su desarrollo en el entorno. La aplicación de los planes de poda según el estándar europeo promueve una gestión urbana más sostenible económicamente rediciendo los costes de intervención a corto, medio y largo plazo.
Los planes de renovación e implantación del arbolado están orientados a mejorar la funcionalidad y el valor ambiental del entorno urbano o privado.
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